Diferencia entre senderismo y trekking: lo que hay que saber

Senderismo y Trekking: ¿qué significan?

Senderismo

Por tanto, lo que distingue al senderismo es la duración limitada de la actividad; sin embargo, cada quien puede decidir si hacer una caminata más o menos difícil, según las características técnicas del sendero elegido. De hecho, se puede decidir entre enfrentar un camino exigente con algunos tramos expuestos, u optar por una ruta más tranquila, evitando muchos desniveles.

El punto fuerte del senderismo es el hecho de que es una actividad apta para todos; de hecho, es una solución excelente para quienes quieren pasar un día en la montaña y ofrece diferentes posibilidades según las necesidades, desde el sendero fácil hasta la caminata más exigente.

Trekking

En el contexto de la montaña, la palabra Trekking se refiere a una caminata de varios días que implica pasar la noche en una tienda de campaña, o en una estructura adecuada, y que puede hacerse a través de senderos, pero también por caminos no marcados. Este término es similar a lo que en inglés se conoce como backpacking, es decir, viajar con mochila.

Al igual que el senderismo, el trekking se caracteriza por la duración de la actividad, mientras que en cuanto a la dificultad de la caminata, hay que tener en cuenta que quien viaja con mochila a menudo decide ir por rutas no marcadas, con terrenos más impredecibles y difíciles.

Un trekking es una verdadera aventura y este es su mayor punto fuerte. Ir de trekking significa desafiarse a sí mismo, requiere preparación física y una buena organización. Lo hablamos en este otro artículo.

Diferencia entre senderismo y trekking: ¿cómo distinguirlos?

Duración

Como se puede deducir de la definición de ambos términos, la principal diferencia entre senderismo y trekking es la duración de la actividad; de hecho, el primero indica una caminata de un día, mientras que el segundo se refiere a una salida de varios días.

Dificultad técnica

En cuanto a la dificultad de los caminos que se recorren en el senderismo y los viajes con mochila, no hay una distinción clara, ya que el senderismo puede incluir rutas técnicas, mientras que el trekking también puede hacerse en rutas fáciles y bien marcadas. Sin embargo, durante el trekking se pueden tomar tramos fuera del sendero y esto puede aumentar la dificultad técnica de la caminata.

Tipo de terreno

Durante el senderismo difícilmente se encontrarán terrenos muy diferentes entre sí, ya que la caminata tiene una duración limitada.

Por el contrario, durante el trekking es posible encontrarse con situaciones muy diferentes, ya que la caminata se extiende durante varios días. Un día puedes estar atravesando un sendero forestal, otro un camino rocoso y otro enfrentando cantizales y pedregales.

Preparación física

Aunque el senderismo y el trekking pueden incluir senderos parecidos en términos de dificultad, el trekking sigue siendo más exigente porque la actividad dura varios días. Por este motivo, la preparación física de quienes quieren viajar con mochila debe ser adecuada y requiere una buena resistencia en largas distancias.

El senderismo, por su parte, es una actividad que cubre menos kilómetros y, por tanto, es adecuada para personas menos entrenadas; sin embargo, las caminatas con grandes desniveles podrían poner a prueba la resistencia.

Equipamiento

La diferencia en cuanto a la duración del senderismo y el trekking implica también un equipamiento diferente. Si se decide hacer una caminata de un día, es suficiente una mochila de 20-25 litros para empacar lo que se necesite durante la caminata, por ejemplo, comida, agua y algo de ropa protectora en caso de frío o lluvia.

Si, en cambio, se quiere hacer una caminata de varios días, se recomienda llevar una mochila de al menos 40 litros, porque será necesario llevar ropa para cambiarse, equipos de acampada para las comidas y todo lo necesario para pasar la noche, como un saco de dormir y una tienda de campaña. Organizar una mochila de Backpacking no es sencillo y hay que tener cuidado de no llevar demasiadas cosas, manteniendo controlado el peso.

Sea cual sea la actividad que se elija, es recomendable llevar siempre un botiquín de primeros auxilios, del que hemos hablado en este otro artículo. También puede ser útil llevar un dispositivo GPS, especialmente para las caminatas largas en las que se podría pasar por senderos no señalizados.

Zapatillas de trekking o senderismo: guía para elegir

Como se ha visto, el senderismo y el trekking son dos actividades diferentes y, por tanto, requieren un calzado con características distintas.

En primer lugar, hay que destacar que para cualquier tipo de caminata de montaña es imprescindible utilizar un calzado adecuado, con suela estructurada y bien protegida. Se desaconseja fuertemente usar zapatillas deportivas, es preferible llevar zapatillas de senderismo, botas de trekking u otras botas de montaña.

Botas de trekking

El trekking, o viaje con mochila, es una actividad de varios días en la que se enfrentan diferentes terrenos y que implica llevar mochilas, a veces muy pesadas. El peso de la mochila puede desequilibrar la caminata y las irregularidades del terreno pueden poner en riesgo los tobillos, por lo que una característica clave de las botas de trekking es una caña alta para dar más soporte al tobillo y a la columna vertebral.

Una caminata de varios días también requiere una suela con buena resistencia y rigidez para terrenos difíciles y un uso prolongado. Sin embargo, la rigidez de la suela no debe comprometer la comodidad del ajuste, es por ello que las botas de trekking ideales deben tener también una amortiguación simple para llevarlas por varias horas sin cansar el pie.

En cuanto a la pala, es preferible que haya una protección en las zonas más expuestas a la abrasión, como la puntera y el talón. También debe contar con una membrana impermeable, ya que en una caminata de varios días podría llover o habría que caminar sobre hierba mojada o terreno húmedo.

Garmont ha diseñado los productos de la categoría TREKKING teniendo en cuenta estos aspectos. Las características descritas pueden encontrarse en botas de trekking como las RAMBLER 2.0 GTX, con una pala de piel de ante y rejilla, y las DAKOTA LITE GTX, con un aspecto clásico y una pala en piel nobuk de 2,4 mm.

Calzado de senderismo

Una caminata de un día puede ser más o menos difícil en función de lo largo del sendero y el tipo de terreno, es por ello que el calzado de senderismo puede tener una caña baja, media o alta según la protección que se le quiera dar a los tobillos.

La dificultad de la ruta es una guía para elegir la suela de las zapatillas de senderismo. Para los senderos fáciles, se puede optar por un calzado de suela flexible y acolchada, mientras que, para los senderos más difíciles, con terrenos complicados e irregulares, será necesario un calzado de suela más rígida y resistente.

Lo mismo aplica para la protección de la pala. El senderismo por rutas muy sencillas requiere una protección mínima, mientras que para los caminos difíciles es preferible que la pala esté protegida con aplicaciones de goma u otro material en la puntera y el talón.

La impermeabilidad no es una característica fundamental en el calzado de senderismo, especialmente para quienes prefieren hacerlo en verano. En cambio, si se planea enfrentar senderos con tramos mojados o se practica senderismo en invierno, es útil llevar un calzado con membrana GORE-TEX o G-DRY.

Garmont ha desarrollado la categoría EXCURSIONISMO para satisfacer las necesidades de quienes hacen un senderismo fácil, especialmente el modelo GROOVE MID G-DRY, cómodo y acolchado, perfecto para tramos cortos en la media montaña.

Para quienes prefieren caminos más difíciles, Garmont ha desarrollado la categoría HIKING PERFORMANCE, con un calzado más rígido y protector. En esta categoría, el producto más popular es el VETTA TECH GTX, ideal para el senderismo de día y perfecto también para las rutas más técnicas y las vías ferratas.